La respiración es mucho más que un acto automático: es una puerta directa a nuestro equilibrio interior. La respiración consciente, cuando se convierte en una práctica diaria, transforma nuestra relación con el cuerpo, la mente y la energía. Nos permite acceder a un estado de coherencia corazón-cerebro que potencia la sanación, la claridad mental y el crecimiento espiritual.
Inspirada en las enseñanzas del Dr. Joe Dispenza, investigador y conferencista reconocido mundialmente por su trabajo sobre neurociencia y transformación personal, esta práctica te invita a reconectar con tu poder creador desde adentro hacia afuera.
¿Qué es la respiración consciente?
Es una técnica milenaria revitalizada por la ciencia moderna que nos permite regular el sistema nervioso, reducir el estrés, elevar la frecuencia emocional y acceder a estados meditativos profundos. Con solo dedicar unos minutos al día, puedes reorganizar tu energía vital, equilibrar tu biología y alinear tu propósito.
Guía paso a paso: práctica de respiración consciente
1. Encuentra tu espacio y postura
Elige un lugar tranquilo. Siéntate con la espalda recta y los hombros relajados. Cierra los ojos y lleva tu atención al momento presente.
2. Respiración profunda y consciente
Inhala por la nariz en 5 segundos, expandiendo el abdomen, el pecho y la parte alta de los pulmones. Retén el aire 5 segundos. Exhala lentamente por la boca en 6 segundos, soltando toda tensión.
3. Enfoque en el corazón
Con cada respiración, visualiza tu atención en el centro del pecho. Imagínalo latiendo con armonía. Este enfoque crea coherencia entre el corazón y el cerebro, favoreciendo un estado profundo de calma.
4. Visualización y emoción elevada
Visualiza la energía vital (prana) ascendiendo desde la base de tu columna hasta la coronilla. Acompaña este flujo con una emoción elevada como gratitud, amor o alegría. Estas emociones fortalecen la señal que tu cuerpo recibe y potencian la neuroplasticidad.
5. Ciclos de retención y vacío
Después de cada inhalación y exhalación, incluye una breve pausa de 3 a 5 segundos. Estas retenciones profundas activan cambios en la química cerebral y facilitan la expansión de la conciencia.
6. Duración y constancia
Realiza esta práctica durante 10 a 20 minutos, idealmente por la mañana o antes de dormir. La práctica diaria de respiración consciente consolida nuevas conexiones neuronales y eleva tu nivel vibratorio.
¿Por qué practicarla todos los días?
- Reprogramación mental: Genera nuevas creencias, enfocadas en la paz, la abundancia y el poder interior.
- Regulación emocional y física: Equilibra tus niveles de cortisol, reduce la ansiedad y fortalece el sistema inmune.
- Expansión de la conciencia: Mejora la capacidad de manifestar desde el campo cuántico.
- Bienestar integral: Armoniza cuerpo, mente y espíritu, promoviendo un estado de plenitud constante.
Respira, siente y despierta
En el enfoque holístico, la respiración consciente es una herramienta clave para conectar con tu esencia, sanar desde adentro y vivir con más presencia, propósito y conexión. Al integrar esta práctica en tu rutina diaria, no solo cultivas tu bienestar físico, sino que activas tu potencial espiritual y energético.
Por Susana Corral | www.susanacorral.com
